Fans & Editoriales

¡Atiende Lebrel!

Hoy, tras la jornada de reflexión y voto me ha dado a mi por pensar no tanto por generar una opinión en los lectores de este blog como para realizar unas cuántas preguntas al aire, que tampoco es que busquen una respuesta concreta o indeterminada.

En primer lugar, y es el motivo de por qué me he animado a escribir esta entrada ¿por qué hay fans que defienden editoriales como si de su vida se tratara, pegando manguzadas a todo el que se atreve a ponerlas en entredicho? 

La verdad es que es un fenómeno que no es que se produzca únicamente en el rol, ya que en la informática también pasa (Apple/Microsoft sin ir más lejos, pero no sólo ellos exclusivamente). Sea como sea, yo veo normal que un autor, o un editor salga a la palestra a defender sus productos, a dorarnos la píldora o pegar las mentadas manguzadas a diestro y siniestro, ¿pero un comprador habitual? ¿Por qué esa vehemencia en sus argumentos? ¿Por qué esa inquina contra la competencia de la editorial defendida?

En fin, yo soy un comprador, única y exclusivamente (hasta que se demuestre lo contrario), y realmente me importa bien poco si una editorial se pone a vender PDF, hacer rescate, pone grapa o hilo+encolado, imprime en color o B/N exclusivamente o si vende únicamente en Madrid, en España o en Australia. 

Vamos a ver, señores, a nosotros, como compradores ¿no nos debería interesar el producto? ¿Por qué nos alegramos porque una editorial tome una decisión comercial y nos rasgamos las vestiduras porque otra haga lo contrario? Es decir, a mi me importa poco la estrategia comercial de una empresa mientras que los productos roleros:

1. Me gusten.

2. Sean asequibles.

3. Sean fácilmente localizables.

4. Le den una continuidad a lo que me gusta.

Yo entiendo completamente las reseñas de productos para vender un juego, ya que ayuda a saber qué voy a comprar ¿pero qué me importa a mi si lo tengo que pedir a la editorial, a la tienda física o a la tienda virtual? En serio, señores, ¡que estamos perdiendo el norte!

Ahora me dicen que una editorial va a vender sus productos en Alemania. Ahora que ésta sólo va a usar Ebay para sus ventas. Ahora que la otra sólo aceptará Paypal en su tienda virtual, y que aquella sólo va a distribuir en tiendas físicas: señores, me es lo mismo mientras sigáis sacando productos que me interesen.

¿Vale más un juego de rol de zombis de una editorial que de otra? Hombre, entiendo que aquí pese más el sistema de juego, el aspecto del libro y el precio final del mismo (y por supuesto, el contenido), ¿pero negarse a comprar un producto porque es de "tal" editorial y no "tal otra"? ¿De verdad creéis que si no compráis un producto a una editorial estáis ayudando a su destrucción y si compráis a otra ayudáis a su encumbramiento?

Vale, que la afición es pequeña, y entiendo que si no le compráis el juego a alguien que se está autoeditando (por cierto, comprad mis juegos) no ayudará para que siga escribiendo más, pero en fin, si os gusta algo, ¿tenéis que dejar de comprar en un lugar porque te han hablado mal de él? ¿Que la editorial tenga fama de follonera o de tener una cohorte de fanboys/girls recalcitrantes tiene que influirte para que te lo pienses dos veces antes de comprar algo que por reseñas o lo que has podido ver en la tienda? ¿No debería influir sólo la temática, sistema o estética?

Muy bien, la Editorial Menganita ha tenido una cagada de la leche y ha sacado una tirada de libros defectuosos y endebles y tú tienes uno de ellos, ¿eso quiere decir que ningún otro libro que saque caerá en tus manos porque UN producto les ha salido rana? Y perdonadme pero esto lo he visto en editoriales grandes, pequeñas, micros y macros. ¿Quiere decir que esa editorial no tiene capacidad de aprender de sus errores y que toooooooooooodos los productos que ponga a la venta seguirán la estela de éste último? No perdamos la perspectiva, caballeros.

Somos compradores en nuestra inmensa mayoría, consumidores, y tenemos derecho a quejarnos sobre que un producto no nos gusta por cualquier razón, ya que hemos pagado y no consideramos que lo dado por lo recibido se corresponda, ¿por qué entonces meterse en foros, blogs y páginas a vilipendiar a los que están trabajando para una editorial para sacar productos que ni siquiera vas a comprar? ¿Alguien le ve a esto alguna lógica?

Y es que yo diría que los compradores nos convertimos en fans de una editorial por dónde ha caído un producto u otro. Si Dragon Age lo traduce Tal, Pascual o Queseyó Ediciones en lugar de Ermenegildo Editions dará igual, ya que los que querían ver el juego traducido se lanzarán a comprarlo lo traduzca quien lo traduzca. A mi si ahora me dicen que Ediciones Sotomonte han cogido la licencia de Warhammer 2ª edición y continuar lo que no pudo terminar Ermenegildo Editions por la caducidad de la licencia, yo me voy a lanzar a comprar lo que salga independientemente de que tenga más juegos de una edición u otra. ¿Por qué esas filias, por qué esas fobias? ¿Qué sentido tiene? 

Para terminar, vuelvo a reiterarme en que no busco realmente un debate o un posicionamiento, tan sólo comento esto porque me parece que se ve mucho y que el ambiente se va enrareciendo cuando deberíamos estar contentos por tener más rol patrio y extranjero que nunca en nuestras mesas. Aunque eso sí, ya que me pongo y cogido la directa pondré un broche al traje.

Como comprador: Editoriales, en serio, yo compraría la gran mayoría de las novedades que han salido o van a salir para estas navidades, pero la tendencia actual de atropellarnos a novedades y a arañaros entre vosotras nuestra lealtad por la compra de un producto en detrimento de otro sólo va a conseguir que tengamos lo que siempre hemos tenido, un pez gordo que se comerá a los chicos y unos chicos que querrán ser el gordo. Entiendo que todos tenéis que vencer en esta lucha encarnizada, pero si no fueseis tan feroces unos y otros todos tendríais los libros vendidos y no cogiendo polvo en un almacén.

Ea ahí queda eso y una dramatización:

Las Fans de Ufos & Uzis no pueden creer que su juego favorito no vaya a estar disponible para estas Navidades