Más que una reseña diré mi opinión sobre el libro. A mi personalmente me ha gustado, aunque curiosamente no podría recomendar su lectura a cualquiera. ¿Por qué? Pues precisamente por el discurso verboso que utiliza, palabras y cultismos bastantes complicados de entender si no ha mascado uno la lengua muerta del Lacio (el latín, vaya).
Y, como ya digo, no es que la novela esté mal o no sea interesante, ya que trata sobre la investigación de un asesinato verdaderamente asombroso con protagonistas a la altura del caso. El acusado del asesinato del rico Epulón es nada menos que José el Carpintero, y su hijo Jesús contrata a Pomponio para que pruebe que su padre es inocente.
Un caso que se va volviendo cada vez más torcido para nuestro protagonista hasta que al fin da con la clave del enigma. Personalmente, me ha gustado el momento en que aparece "el dios Apolo" en la narración, la verdad es que es de agradecer en un relato "pseudohistoricista" como éste.
Mis parabienes para Helena (Jelen) que fue la que me regaló el librito. Me ha gustado mucho, darling :) Así da gusto recibir regalos :)
P.d.: Ahora estoy con El Péndulo de Foucault, y la verdad es que traspasar sus primeras 100 páginas ha sido el Parto del Tricerátops... espero que en sus más de 800 páginas contenga algo que realmente ensalce la genialidad de D. Umberto Eco, porque El Nombre de la Rosa me pareció una novela magnífica, pero el Péndulo se me está atragantando...
Abandona toda esperanza con el Péndulo, Maestro. Yo lo conseguí leer entero tras mucho esfuerzo, pero no me aportó absolutamente nada. Es más, si me preguntaras ahora de qué va, lo único que podría decirte es "Rosacruces" y "el jodido péndulo". Muy triste tras 800 páginas de tiempo.
ResponderEliminarEstoy seguro de que tienes otros libros en la recámara que merecen mucho más la pena, es mejor que no sigas y te quedes con el buen regustillo del Nombre de la Rosa.
¡Un saludete!
¡Agh! Vaya hombre... pues esto me ha acojonado... :P
ResponderEliminarEn primer lugar, felicidades por el blog.
ResponderEliminarA mi también se me atragantó el Pendulo de Foucault, pero tras un nuevo intento pude acabarlo. Es un libro árido y nada comercial. He de reconocer que al final me gustó pero me prefiero El Nombre de la Rosa.
Pomponio Flato lo tengo pendiente.