Nota: Este artículo es una traducción de la página Sly Flourish.com cuya autoría es de Mike Shea y del cual tenéis el enlace al post original aquí. Esta traducción se realiza con su consentimiento expreso. Os invito a seguirle a través de su página Sly Flourish, su mastodon @slyflourish@chirp.enworld.org o incluso apoyarle a través de su Patreon. Puedes ver otros artículos traducidos siguiendo este enlace.
No soy muy bueno siendo jugador de rol, pero se me da mucho mejor ser el director de juego. Cuando soy el director, estoy totalmente involucrado. Tengo que estarlo. Me encargo de la historia, la partida, el ritmo y la diversión de quienes están sentados a la mesa. Siempre estoy atento.
Cuando juego, hay otros jugadores y el director de juego. Hay momentos de inactividad entre turnos o entre pausas en la conversación. Me distraigo fácilmente cuando no es mi turno y no estoy directamente involucrado en la acción. Quiero mantenerme centrado. Estos son algunos trucos que utilizo:
- Tomo notas durante toda la partida.
- Presto atención a la historia a medida que avanza. Me esfuerzo por comprenderla incluso más allá de la participación de mi personaje.
- Presto atención a los demás personajes. ¿Qué nos interesa a mí y a mi personaje de ellos?
- Me sumerjo en el mundo y lo visualizo. ¿Cómo son realmente esas lúgubres mazmorras? ¿Qué se siente al estar en presencia de un enorme dragón verde?
Incluso con estos trucos, cuatro horas es mucho tiempo y a veces mi mente se distrae. Que los dioses me ayuden si mis ojos se desvían hacia mi teléfono.
Entonces me enfrento a un problema. Si mi mente se distrae durante demasiado tiempo, es difícil volver. La partida ha seguido adelante. Mucho de lo que ha pasado en el juego se me ha escapado. No sé dónde estamos ni qué estamos haciendo. No quiero admitir que he perdido el hilo, así que intento ponerme al día, pero entonces mi mente divaga aún más porque no puedo entender lo que está pasando ahora si no sé lo que ha pasado antes.
Esa es la espiral del aburrimiento. Como jugador o jugadora vuestra mente puede distraerse y, cuando intentáis volver, no podéis porque toda la historia ha avanzado. No queréis pasar vergüenza admitiendo que estabais en las nubes, pero ahora estáis aún menos involucrados y la espiral continúa.
Rompe la Espiral del Aburrimiento
Como jugador, pedid una pausa de un minuto y pedid un resumen rápido de cómo están las cosas. Quizás podáis poneros al día durante un descanso. Si tenéis la oportunidad, preguntad a alguno de los otros jugadores o jugadoras de la mesa si pueden ponernos al día. No pasa nada por admitir que os habéis distraído mentalmente un poco y volver a la normalidad.
¿Qué podemos hacer como DJ para ayudar a prevenir la espiral del aburrimiento en los jugadores y jugadoras?
Reformula la Situación Actual
Si véis que uno o más jugadores o jugadora se han desconectado, haced una pausa y volved a describir lo que está pasando y dónde está cada cosa. ¿Dónde están los personajes? ¿Qué está pasando a su alrededor? Recordad que los jugadores o jugadoras solo captan aproximadamente la mitad de lo que describáis, así que dadles la información que necesitan para comprender la situación, aunque creáis que ya la tienen. Sed específicos. Escribid cosas en fichas y dejadlas sobre la mesa, como los nombres de los PNJ o los detalles de un lugar. Dad a los jugadores y jugadoras algo visual y físico a lo que aferrarse.
Pedid un Descanso Cada Noventa Minutos
Haced pausas regulares en el juego. Animad a la gente a moverse. Tomad otra bebida o id al baño. Tomar un descanso ayuda a romper narrativas largas y divide los juegos más largos en partes más cortas. Luego, cuando todos vuelvan a la mesa, volved a explicar la situación y dadles a todos una nueva referencia.
Recurrid a los Jugadores y Jugadoras y Dadles Contexto
Es tentador recurrir a los jugadores y jugadoras que pueden haberse desconectado, pero puede parecer conflictivo y desconcertarlos. En cambio, está bien recurrir a los jugadores y jugadoras callados, pero dadles contexto sobre la situación y dónde se encuentra su personaje en medio de ella. Hacedles saber lo que su personaje sabría. Recurrid a ellos, describid la situación y luego preguntadles qué quieren hacer. Reiterar la situación les da tiempo a los jugadores y jugadoras para volver a conectar y captar los detalles de la historia.
Describid Entre Turnos
Si os encontráis dirigiendo un combate en el Teatro de la Mente (NdT: Aquí en castellano), describid lo que está sucediendo en la batalla antes del turno de cada personaje, creando así el contexto en torno a ese personaje. Describid la situación en cada turno proporciona a los jugadores y jugadoras el contexto que necesitan para tomar decisiones significativas en una batalla. Cuanto más comprendáis al personaje del jugador o jugadora, más podréis adaptar vuestra descripción. Informad a los pícaros sobre la cobertura detrás de la que pueden esconderse. Informad a los magos sobre las agrupaciones de monstruos para las áreas de ataque. Señalad a los paladines los enormes muertos vivientes a los que pueden querer atacar y derrotar. Describid la situación entre cada turno y adaptad vuestra descripción al personaje.
Dirigid Partidas Más Cortas
Creo que tres horas es la duración ideal para una partida. Cuatro es lo habitual, sobre todo en sesiones organizadas o en convenciones, pero tres horas parece ser el punto óptimo para una sesión significativa que sea lo suficientemente corta como para mantener a la gente interesada. Si os dais cuenta de que vosotros o vuestros jugadores y jugadoras os distraéis en la segunda mitad de la partida, considerad la posibilidad de acortarla.
Reconoced la Espiral del Aburrimiento
Por encima de todo, reconoced la espiral del aburrimiento, tanto como DJ como jugador o jugadora. Existe y hay cosas que podemos hacer para mitigarla y seguir adelante, de modo que podamos disfrutar cada minuto que pasamos con nuestras amistades alrededor de la mesa.